Los Mejores Remedios Naturales Básicos para las Enfermedades del Invierno.
Comienza la época de catarros y dolores de garganta, males comunes de los que poca gente se libra en ésta época del año. Aunque los remedios naturales no sustituyen a la medicina convencional, si se emplean adecuadamente sirven para preparar a nuestro organismo y estimular sus defensas, y son muy recomendables para tratar resfriados leves en sus primeras fases e impedir que evolucionen hacia algo más serio. Te damos una serie de consejos para cuidarte este invierno de la manera más natural.
1-“Más vale prevenir que curar”
Si cuidamos el sistema inmunitario, nuestro organismo estará mucho mejor preparado para combatir las infecciones. El uso de sustancias naturales producidas por las abejas es conocido por todos. Los beneficios del polen, el propóleos y la jalea real sobre la salud son numerosos, ya que contienen muchas vitaminas y nutrientes, fortalecen el sistema inmunitario y mejoran la concentración y el estado de ánimo, por lo que son idóneos para sentirse mejor durante estos meses en los que la falta de luz y el frío nos hacen más propensos a la depresión y la melancolía. Combinado con la toma de un vaso de jugo de naranja diario cuidamos el sistema inmunitario y estimulamos nuestras defensas. Pero ¡OJO! de nada sirve levantarse un día enfermo y pensar que una cucharita de jalea real va a hacer milagros, hay que ser constantes y tomarlos durante todo el invierno!!
2-Jengibre, el antigripal de la naturaleza
Para los primeros síntomas de la gripe, prepara esta infusión: pica una cucharada de jengibre fresco (también lo puedes conseguir en saquitos de té) y agrégalo a una taza de agua hirviendo. Puedes añadir miel y un poco de limón. El jengibre te ayudará a sentirte mejor por sus propiedades analgésicas, antipiréticas y antibacteriales.
3. Vaporizaciones de eucalipto
Abre tus vías respiratorias y alivia la irritación de la garganta con vapor de eucalipto, que tiene propiedades expectorantes. Con mucho cuidado, vacía agua muy caliente en una vasija amplia y agrega aceite u hojas de eucalipto. Coloca una toalla en tu cabeza para tratar de atrapar todo el vapor y poder respirarlo. (como nos hacía la abuela!!)
4. Irrigación nasal
Odvídate de la congestión nasal: mezcla un cuarto de cucharadita de sal marina sin yodo y un cuarto de cucharadita de bicarbonato en una taza de agua tibia. Vierte un par de gotas en cada fosa nasal, luego inclínate hacia adelante para que escurra un poco y suena tu nariz suavemente. Según la Asociación de Educadores sobre Asma, irrigar la nariz con una solución salina ayuda a limpiarla de moco, mejorando la respiración, pero también ayuda a eliminar las sustancias alérgenas y a combatir las bacterias y virus que puedan alojarse en la nariz.
ATENCIÓN: Las plantas son la base de la medicina moderna, y las infusiones y los tratamientos a base de hierbas medicinales son idóneos para combatir pequeñas afecciones en sus primeras fases. Sin embargo, si los síntomas persisten o se agravan, es necesario acudir al médico, y, en caso de embarazo o de tener enfermedades crónicas, hay que consultar siempre con un especialista antes de usarlas. En ningún caso recomendamos interrumpir tratamientos médicos en curso y reemplazarlos por hierbas medicinales sin la debida aprobación del profesional de la salud. Dietética My Angl's.